jueves, 21 de febrero de 2013

Compañero de cubo

He salido a tirar la basura y, justo cuando me acercaba a uno de los cubos, una persona se ha acercado a otro a rebuscar entre la basura.



Instintivamente he elegido el cubo más alejado para tirar unas bolsas que seguramente iban a ser abiertas según me largara. He vuelto a entrar a mi portal y me he dado cuenta de que ni tan siquiera he sido capaz de decirle hola, buenas noches o cualquier otra palabra vacía. Me he sentido mal como pocas veces. Entonces he recordado que tenía un Tupper con cocido en la nevera, así que me he vuelto a salir y le he preguntado si quería cenar. Me ha dicho que sí, así que he vuelto a mi casa, he calentado el cocido y se lo he sacado. Me ha dado las gracias con sonrisa impregnada de tristeza, con una expresión a medio camino entre la derrota total y el agradecimiento, y se ha ido. He vuelto a entrar en mi casa con una sensación aún peor que la primera.

Y aún dicen que hacen lo que deben. Hijos de puta.

No hay comentarios: