martes, 8 de marzo de 2011

Fuckers y Pagafantas

Tengo un amigo que siempre dice:

Si le pones los cuernos a tu novia no pasa nada, pero si te los pone ella sí, porque significa algo.

Otro asegura que:

Si mi hija tuviera un marido decente al que aprecio y me enterara de que (él) le ha sido infiel, posiblemente le perdonaría, después de haber tenido una charla seria con él. En cambio, si a mi hijo le pusiera los cuernos su mujer le instaría a que la dejase sin dudarlo.

Creo que su argumento está claro. Los hombres son más proclives a zumbarse a mujeres puntuales que no les importan, mientras que las mujeres no. Voy a intentar interpretar esto desde el punto de vista genético.

Es bastante innegable que los hombres nos dejamos guiar por nuestro nuflo hasta extremos ridículos. La razón podría ser que a lo largo de la historia de nuestra especie aquellos hombres que metieron el nuflo allá donde pudieron tuvieron mucha más descendencia que los que no. Llamemos a esta tendencia el instinto fucker. Según esto, todos deberíamos ser unos donjuanes de la vida y nadie tendría novia. Está claro que el modelo es demasiado simple.

Imaginad un mundo de fuckers donde a las mujeres les cuesta un mundo llevar adelante a sus hijos en ausencia de los padres, quienes como buenos fuckers siguen su camino fornicativo en lugar de cuidar de mocosos babosos. En ese caso, si algunos de los hombres empiezan a tener un instinto pagafántico y a optar por ser fieles y cuidar de su prole, es posible que sus hijos tengan más opciones de sobrevivir que los de las madres solteras abandonadas por los fuckers. Como consecuencia, se establece un equilibrio en la población entre tíos con tendencias fuckers y pagafánticas, y al cabo de un tiempo una mezcla de estos dos instintos en cada individuo, que al fin y al cabo es lo que observamos hoy en día.

Esto tiene mucho que ver con por qué a las mujeres les ponen los cabrones que las dejan tiradas. En el final de ese post, argüía que las tías no tienen tantos incentivos genéticos para ser promiscuas como los tíos. Ahora tengo mis dudas que nacen de diversos ejemplos observados de tías a las que les gusta follar por follar (no diré que son más putas que las gallinas para que no se me enfaden nuestras lectoras con tendencias feministas). ¿De dónde puede haber surgido ese instinto?

Yo creo que puede surgir de que en un mundo de pagafantas y fuckers, la estrategia óptima podría ser la siguiente. Buscarte un pagafantas majete, pero si pasa un superfucker, follártelo como si no hubiera un mañana para que luego el pagafantas cuide de ti y de sus hijos (los del superfucker, se entiende). Esto te asegura que alguien te ayude a llevar adelante tu descendencia y además tener hijos fuckers que sigan diseminando tus geners por doquier.

Aquí quisiera hacer hincapié que aunque cuente todo esto como si fuera algo consciente por parte de los implicados, no lo es en absoluto. Ningún tío piensa voy a follar mucho para tener muchos hijos y ninguna tía piensa voy a follarme a ese chuloputas para que de mayores mis hijos también se follen a todo el barrio. A los tíos simplemente les gusta más follar que a un tonto un pirulí y a las tías les ponen hiperberracas los chuloputas. 

En el fondo, lo que mis amigos querían decir es que estos instintos primarios productos de la selección natural deben ser tenidos en cuenta como marco para nuestras relaciones, ya que es absurdo pensar que somos completamente racionales y que estamos intelectualmente por encima de (por ejemplo) volvernos locos una noche en una discoteca. Y creo que tienen razón, pero entonces debería también entender que sus novias no estén intelectualmente por encima de dejarse follar contra la pared de vez en cuando por algún fucker de la vida...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Una vez mas aciertas de pleno. Yo por otra parte y sin mucho respaldo academico/gentico me quedo en que somos unos perros, que mentimos mas que judas y que nuestros instintos apestan, utilizamos ingenieria social avanzada para lograr maximo beneficio, en este caso meterla en caliente.
¿Oigo palomas y halcones? Digo por el gen egoista. Pero me gustan mas tus ejempos.

Anónimo dijo...

oyes bien. efectivamente es la misma idea.

Anónimo dijo...

Gracias a los avances de la tecnica y la genetica los hombres con tendencias pagafanticas tienen un nuevo aliado, los test de paternidad. Tan facil como pasarle una torunda(una de mis palabras favoritas, q no es mas que un bastoncillo de oidos en lenguaje tecnico) por el interior de la boca al niño, mandarlo analizar y gritar a pleno pulmon "pedazo de cacho de zorra! A la prole del fucker la va a criar su puta madre!!" Y con toda la calma coger la puerta.
Asi que igual hay q cambiar de estrategia queridas lectoras(cada vez que escribo lectoras me mofo yo solo por lo improbable que me parece)
Y vosotros ya sabeis "ese hijo no es mio hasta que se demuestre lo contrario, si te sale mulato mosqueate antes de hacer el test.
Phineas